♥ Vagamente siento
que nunca olvidaré
lo que no quiero olvidar.
Incluso si no intento recordarlo.
Era un día frío.
Seguí esperando,
por ti,
bajo la lluvia.
No tenía miedo de nada,
incluso pensaba
que aunque fuera el último día de mi vida,
no me importaría.
La gente que estaba
sonriendo felizmente
pasaba junto a mí,
muchas veces.
Pero yo sonreía,
más amablemente que nadie más.
De pie, sola,
sin paraguas.
Cuando me cubrí los ojos con mi helada mano
y te vi aparecer
no era por tristeza
por lo que estaba llorando.
Un rayo de luz
brilló sobre nosotros,
como si celebrara
la manera en que nos conocimos. ♥
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